Este impresionante broche de cocodrilo, martillado íntegramente a mano en plata 950, es el resultado de incontables horas de meticuloso trabajo artesanal. Cada detalle de esta poderosa criatura ha sido capturado con una precisión asombrosa, convirtiéndola en una pieza de arte verdaderamente excepcional.
La magia de su creación reside en la combinación de las técnicas ancestrales del cincelado y repujado. Mediante el repujado, la plata se eleva desde el reverso, dando forma al imponente volumen y a la silueta característica del cocodrilo. Posteriormente, el cincelado entra en juego, donde con herramientas finas se trabajan las escamas, la musculatura y cada rasgo facial, aportando un realismo y una profundidad inigualables.
Lo que distingue a esta obra es el oxidado aplicado estratégicamente en el cuerpo del cocodrilo. Este proceso oscurece selectivamente la plata, creando un contraste dramático que resalta de manera espectacular la compleja textura de su piel escamosa, dotando a la pieza de una autenticidad sorprendente y un carácter inconfundible.
Para coronar esta obra, los ojos del cocodrilo han sido realzados con un engaste de citrinos naturales. Estas piedras preciosas, con su vibrante tonalidad dorada, aportan un brillo cautivador que simula la mirada penetrante del reptil, añadiendo un toque de lujo y sofisticación.
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